Publicado en blog Impact of Social Sciences (London School of Economics-LSE)
https://scholarlykitchen.sspnet.org/2022/01/18/sciencedirect-as-content-supercontinent/
¿ScienceDirect de Elsevier como supercontinente de contenidos?
Por LISA JANICKE HINCHLIFFE
18 DE ENERO DE 2022
Elsevier ha anunciado hoy un proyecto piloto en el que la American Chemical Society, la Royal Society of Chemistry, Taylor & Francis y Wiley compartirán contenidos seleccionados con la plataforma ScienceDirect. Los artículos aparecerán en los listados de búsqueda y navegación.
En el proyecto piloto, más de 70.000 artículos de 35 revistas de química orgánica y transporte se integrarán con el contenido de Elsevier en ScienceDirect. La elección de centrarse en dos campos distintos es interesante, incluso para un proyecto piloto, y nos dice algo sobre cómo Elsevier podría hacer funcionar este programa.
A efectos del programa piloto, la visualización y el acceso al texto completo variarán con respecto al contenido de Elsevier. Los resúmenes del contenido piloto podrán verse en ScienceDirect. Cuando el contenido piloto sea de acceso abierto, el texto estará disponible en ScienceDirect; sin embargo, el usuario será vinculado al sitio web del editor original para obtener el PDF formateado. Si el contenido sólo está disponible por suscripción, los usuarios serán enlazados al sitio web del editor original sin que se muestre el texto completo en ScienceDirect. Los usuarios que tengan derecho al contenido por suscripción, tal como se determina en ScienceDirect a través de la funcionalidad GetFTR, serán enlazados directamente al texto completo en el sitio web del editor original. Los demás usuarios, que no tengan derecho o cuyo estado de derecho no pueda determinarse, serán dirigidos a la página de destino del artículo en el sitio web del editor original.
Esta no es la primera incursión de Elsevier en la mejora de la oferta de ScienceDirect mediante la vinculación con otros editores. Por supuesto, tanto Elsevier como otros editores se benefician de los enlaces de Crossref. Sin embargo, los que llevan tiempo en el sector pueden percibir algunos ecos del programa de enlaces de ScienceDirect Gateway, que permitía a las bibliotecas habilitar enlaces externos desde ScienceDirect a editoriales asociadas si estaban suscritas a contenidos de esas editoriales. En aquel momento, Pat Sabosik, vicepresidente ejecutivo de Elsevier para la publicación electrónica de ScienceDirect, observó "Estos acuerdos de enlace de referencia subrayan el poder que una verdadera plataforma multieditorial como ScienceDirect puede ofrecer a sus usuarios finales". Con este proyecto piloto, es evidente que Elsevier sigue intentando avanzar en un modelo en el que ScienceDirect sea más un centro de contenidos que una simple plataforma de distribución de contenidos específicos de un editor.
¿Un supercontinente en desarrollo?
Si avanzamos más de dos décadas hasta hoy, las infraestructuras para el alojamiento de textos completos, la vinculación, la comprobación de derechos y la autenticación/autorización han evolucionado significativamente, muchas de ellas desarrolladas con el apoyo y las contribuciones significativas de Elsevier, así como de otros editores importantes. Gracias a este proyecto piloto, podemos empezar a ver lo que podría ser ScienceDirect como "plataforma multieditorial". En cierto modo, esto parece señalar un movimiento para desarrollarse como un supercontinente, por utilizar el término acuñado por el compañero de Scholarly Kitchen, Roger Schonfeld. Si lo consigue, ScienceDirect se posicionaría para competir con ResearchGate y Google Scholar, entre otros contendientes del supercontinente. Mientras que en un momento dado parecía que Mendeley iba a ser el centro de la estrategia de Elsevier para agregar el descubrimiento y el acceso, este piloto sugiere que ScienceDirect podría desempeñar este papel en su lugar, en particular en la competencia con ResearchGate, una empresa contra la que Elsevier tiene demandas en curso en Alemania y Estados Unidos.
Contrariamente a la idea de Schonfeld de que un supercontinente proporcionaría contenido sin que el usuario abandonara la plataforma del supercontinente, sin embargo, al menos en este proyecto piloto, ScienceDirect no sirve el texto completo de los artículos de suscripción al usuario y no sirve el PDF de los artículos de suscripción o de acceso abierto al usuario. Si bien el usuario tiene una experiencia integrada de búsqueda, navegación y visualización en ScienceDirect, el acceso y la entrega de contenidos siguen estando distribuidos en múltiples plataformas. Esto refleja lo que Gaby Appleton, entonces Director General de Mendeley y Productos de Investigación de Elsevier, denominó una "galaxia conectada de conocimiento por la que los investigadores pueden viajar a la velocidad de la luz" en un artículo invitado de Scholarly Kitchen.
Este proyecto piloto de ScienceDirect ofrece una experiencia de usuario mejor que la que resulta de que los editores proporcionen su contenido a Google para su indexación, ya que en Google Scholar no se comprueban los derechos, incluso cuando se facilita la autenticación. En cambio, el contenido sindicado a ResearchGate -por Wiley y Springer Nature, entre otros- se sirve al usuario final en PDF en la plataforma de ResearchGate, con autorización de acceso determinada por ResearchGate y no a través del servicio GetFTR.
Teniendo en cuenta el gasto que supone alojar y servir contenidos en una plataforma, este proyecto piloto de ScienceDirect será un experimento para saber si esos costes pueden ser compensados por GetFTR eliminando la fricción en la navegación de los derechos a través de las plataformas. Si es así, puede ser posible tender un puente entre los "archipiélagos de contenido" sin afectar negativamente a la experiencia del investigador. Puede ser posible que el descubrimiento sea la entrega sin la centralización del contenido. Por este motivo, la satisfacción y la experiencia del usuario serán igualmente importantes para controlar la eficacia del proyecto piloto a la hora de aumentar el tráfico hacia los contenidos de los editores asociados.
Estrategia de entrega de contenidos
También podemos ver en este proyecto piloto que las inversiones de la industria en infraestructura para mejorar el descubrimiento y la entrega de contenidos -por ejemplo, GetFTR, Distributed Usage Logging, identificadores persistentes, Seamless Access- están comenzando a cohesionarse en una experiencia de usuario más sólida e integrada.
Para los editores asociados, este proyecto piloto de ScienceDirect ofrece la oportunidad de seguir desarrollando su estrategia de distribución de contenidos mediante la yuxtaposición de sus artículos en relación con otros del mismo campo disciplinario. En lugar de depender de que los usuarios acudan a una base de datos específica de la materia, la literatura en estos dos campos -química orgánica y transporte- se indexará dentro del ámbito más amplio de la base de datos de ScienceDirect, con todas sus ventajas de metadatos estructurados, vocabularios controlados, identificadores vinculados, etc. que son mínimos o no existen en Google Scholar y ResearchGate. En esencia, este proyecto piloto nos recuerda que ScienceDirect ya es una herramienta de descubrimiento de libre acceso y que un usuario de ScienceDirect obtiene todos los beneficios de una base de datos de suscripción, tanto si sólo puede acceder a las publicaciones de acceso abierto en la plataforma como si sus derechos le permiten acceder también al contenido de Elsevier -y ahora de otros editores- por suscripción.
La fuerza de la colección de química orgánica es particularmente notable aquí, ya que la cartera de Wiley incluye a Chemistry Europe, una asociación de 16 sociedades químicas de 15 países europeos. Dado que la Royal Society of Chemistry no ha implementado GetFTR, cosa que sí han hecho Wiley y la American Chemical Society, también existe la oportunidad de observar el impacto de la identificación de derechos en ScienceDirect sobre el comportamiento informativo de los usuarios. Esto también podría informar a otros editores cuando consideren el valor relativo de invertir en la implementación de GetFTR como soporte para la entrega de contenidos.
¿Y ahora qué?
Parece inevitable que, en caso de que este proyecto piloto se convierta en una oferta permanente de ScienceDirect, los detalles específicos evolucionen. Estaré especialmente atento para ver si sigue siendo un modelo de intercambio de datos mutuo entre Elsevier y sus editores asociados o se convierte en un servicio de pago que cobra a los editores asociados además de los flujos de datos bilaterales. También recuerdo que las cuestiones relativas a la privacidad de los usuarios en el panorama de las publicaciones académicas son cada vez más complejas y que las prácticas de concesión de licencias de las bibliotecas están luchando por mantenerse al día.
A los observadores del sector les puede sorprender este proyecto piloto por varias razones, pero sobre todo que tres de las otras seis editoriales principales estén dispuestas a considerar siquiera la posibilidad de sindicar sus contenidos en la plataforma de uno de sus mayores competidores en el ámbito editorial. Queda por ver qué significa esta colaboración entre competidores a largo plazo, pero con la sindicación de contenidos de Springer Nature a ResearchGate, todas las grandes editoriales, excepto SAGE y, bueno, Elsevier, han respondido a la pregunta de Schonfeld - ¿Sindicarán los editores sus contenidos? - en sentido afirmativo.
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Elsevier’s ScienceDirect as Content Supercontinent?
JAN 18, 2022
Earlier today Elsevier announced a pilot project in which the American Chemical Society, the Royal Society of Chemistry, Taylor & Francis, and Wiley will syndicate selected content to the ScienceDirect platform. The articles will appear in search and browse listings.
In the pilot, more than 70,000 articles in 35 journals in organic chemistry and transportation will be integrated with Elsevier’s content on ScienceDirect. The choice to focus on two discrete fields is an interesting one, even for a pilot, which tells us something about how Elsevier might be able to make this program work.
For purposes of the pilot, the display and access to full text will vary from the Elsevier content. Abstracts of the pilot content will be viewable on ScienceDirect. When the pilot content is open access, the text will be available on ScienceDirect; however, the user will be linked to the original publisher’s website for the formatted PDF. If the content is only available by subscription, users will be linked to the original publisher’s website with no display of full text on ScienceDirect. Users who are entitled to the subscription content, as determined on ScienceDirect through GetFTR functionality, will be linked directly to the full text on the original publisher’s website. Other users, who either lack entitlement or for whom entitlement status cannot be determined, will be directed to the landing page for the article on the original publisher website.
This is not Elsevier’s first foray into enhancing the offerings of ScienceDirect by linking to other publishers. Of course, Elsevier and other publishers all avail themselves of Crossref linking. But, those who have been in the industry for some time may sense some echoes of the ScienceDirect Gateway linking program, which allowed libraries to enable external linking from ScienceDirect to partner publishers if they were subscribed to content from those publishers. At the time, Pat Sabosik, Elsevier’s Executive Vice President, Electronic Publishing, ScienceDirect observed: “These reference linking agreements underscore the power a true multi-publisher platform such as ScienceDirect can provide to its end users.” With this pilot, Elsevier is clearly still trying to advance a model in which ScienceDirect is more of a content hub than simply a publisher-specific content delivery platform.
A Developing Supercontinent?
Fast forward two decades-plus to today and the infrastructures for full text hosting, linking, checking entitlements, and authentication/authorization have evolved significantly, many developed with significant support and contributions from Elsevier as well as other major publishers. Through this pilot, we can begin to see what ScienceDirect as a “multi-publisher platform” might be. In some ways, this seems to signal a move to develop as a supercontinent, to use the term coined by fellow Scholarly Kitchen Chef Roger Schonfeld. If successful in doing so, ScienceDirect would position itself to compete with ResearchGate and Google Scholar, among other supercontinent contenders. While at one point it seemed that Mendeley was to be the locus of the Elsevier strategy to aggregate discovery and access, this pilot suggests that ScienceDirect could serve this role instead, particularly in competing with ResearchGate, a company that Elsevier has ongoing lawsuits against in Germany and the USA.
Contrary to Schonfeld’s notion that a supercontinent would provide content without the user leaving the supercontinent platform, however, at least in this pilot, ScienceDirect is not serving the full text for subscription articles to the user and is not serving the PDF for either subscription or open access articles to the user. While the user has an integrated search, browse, and display experience on ScienceDirect, content access and delivery remains distributed across multiple platforms. This is reflective of what Gaby Appleton, Elsevier’s then Managing Director of Mendeley and Research Products, termed a “connected galaxy of knowledge that researchers can travel through at light speed” in a Scholarly Kitchen guest post.
This ScienceDirect pilot provides a better user experience than the one that results from publishers providing their content to Google for indexing, as there is no entitlements checking in Google Scholar, even when authentication is facilitated. In contrast, content syndicated to ResearchGate – by Wiley and Springer Nature, among others – is served to the end user in PDF on the ResearchGate platform, with access authorization determined by ResearchGate rather than through the GetFTR service.
Given the expense of hosting and serving content on platform, this ScienceDirect pilot will be an experiment to learn if those costs can be offset by GetFTR removing friction in navigating entitlements across platforms. If so, it may be possible to bridge across “archipelagos of content” without negatively impacting the researcher experience. It may be possible for discovery to be delivery without centralization of content. For this reason, user satisfaction and user experience will be equally important to monitoring the effectiveness of the pilot in increasing traffic to the partner publishers’ content.
Content Delivery Strategy
We can also see in this pilot that the industry’s investments in infrastructure to enhance content discovery and delivery – e.g., GetFTR, Distributed Usage Logging, persistent identifiers, Seamless Access – are beginning to cohere into a more robust and integrated user experience.
For the partner publishers, this ScienceDirect pilot offers an opportunity to further develop their content delivery strategy through juxtaposition of their articles relative to others in the same disciplinary field. Rather that relying on users going to a subject-specific database, the literature in these two fields – organic chemistry and transportation – will be indexed within the larger scope of ScienceDirect database, with all of its benefits of structured metadata, controlled vocabularies, linked identifiers, etc. that are minimal or lacking in Google Scholar and ResearchGate. In essence, this pilot reminds us that ScienceDirect is already a freely available discovery tool and a user of ScienceDirect gets all of the benefits of a subscription database, whether they are only able to access the open access publications on the platform or if their entitlements enable access to subscription Elsevier – and now other publisher – content as well.
The strength of the organic chemistry collection is particularly notable here as the Wiley portfolio includes Chemistry Europe, an association of 16 chemical societies from 15 European countries. Given that the Royal Society of Chemistry has not implemented GetFTR, which Wiley and the American Chemical Society have, there is also an opportunity here to look at the impact of the entitlements signaling on ScienceDirect on user information behavior. This could also inform other publishers as they consider the relative value of investing in GetFTR implementation as a support for content delivery.
Where Next?
It seems inevitable that, should this pilot evolve into a permanent ScienceDirect offering, the specific details will evolve. I will be particularly watching to see whether it remains a mutual data sharing model between Elsevier and its partner publishers or develops into a paid service that charges the partner publishers in addition to the bilateral data flows. I am also reminded that user privacy questions in the scholarly publishing landscape are increasingly complex and that library licensing practices are struggling to keep up.
Industry observers may be surprised by this pilot for any number of reasons but in particular that three of the other top six publishers would be willing to even consider syndicating their content to the platform of one of their biggest competitors in the publishing space. What this collaboration among competitors portends long-term remains to be seen, but with Springer Nature syndicating content to ResearchGate, all of the largest publishers except SAGE and, well, Elsevier, have answered Schonfeld’s question – Will Publishers Syndicate Their Content? – in the affirmative.
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